Aunque no puede decirse categóricamente que godos y gautas fueron el mismo pueblo, al menos tuvieron una gran proximidad tanto de las tierras nórdicas que habitaron como por suponérseles un origen común en las grandes migraciones.
Durante la Edad Media, hubo varios reyes suecos de origen gauta, comenzando con Stenkil, que sucedió al svear Emund el Viejo, consiguiendo así los gautas un papel primordial en el desarrollo de la Suecia cristiana. Aunque esto fue motivo de grandes disputas, ya que los gautas eran cristianos mientras que los svear se mantenían recalcitrantes en su paganismo. Uno de aquellos reyes, Inge I, se vio en la necesidad de refugiarse en Västergötland cuando fue violentamente depuesto por el pagano svear Blot-Sven, a comienzos del siglo XI, aunque, con ayuda de los gautas, retomaría el trono.
Durante siglos, la preponderancia entre gautas y svear fue alternándose, sintiéndose como pueblos diferenciados, hasta que en el siglo XV, con la Unión de Kalmar, empezaron a tener una identidad de nación común, haciendo el término svensk englobase a ambos.
En lo que hoy llamamos Suecia, los gautas vivían en la zona de Skara, en pequeños reinos independientes, siendo el más importante el de Västergötland. En el centro del país, vivían los svear, que fueron quienes tuvieron el control en los primeros tiempos de la Suecia unificada.
Durante la Edad Media, hubo varios reyes suecos de origen gauta, comenzando con Stenkil, que sucedió al svear Emund el Viejo, consiguiendo así los gautas un papel primordial en el desarrollo de la Suecia cristiana. Aunque esto fue motivo de grandes disputas, ya que los gautas eran cristianos mientras que los svear se mantenían recalcitrantes en su paganismo. Uno de aquellos reyes, Inge I, se vio en la necesidad de refugiarse en Västergötland cuando fue violentamente depuesto por el pagano svear Blot-Sven, a comienzos del siglo XI, aunque, con ayuda de los gautas, retomaría el trono.
Durante siglos, la preponderancia entre gautas y svear fue alternándose, sintiéndose como pueblos diferenciados, hasta que en el siglo XV, con la Unión de Kalmar, empezaron a tener una identidad de nación común, haciendo el término svensk englobase a ambos.